El control de la presión de los neumáticos en vehículos nuevos está regulado ahora por ley en toda Europa.
Algunos dicen: «No necesito monitorizar la presión de los neumáticos; pronto habrá coches autónomos y comprobarán la presión ellos mismos». O bien: «Me daré cuenta cuando algo ande mal con la presión de los neumáticos». El primer argumento aún está lejos de ser cierto; el segundo es un caso de exceso de confianza y desconocimiento técnico.
¿Cuándo tiene sentido el control?
Estamos siendo monitoreados. Cada vez más, con la creciente capacidad de almacenamiento; eso forma parte de la historia del desarrollo industrial. Y nos monitoreamos cada vez más. Hoy incluso nos controlamos la presión arterial por teléfono, la calefacción de casa, la electricidad que consumimos, las calorías que consumimos. El monitoreo es omnipresente y los datos para comparar están disponibles. Entonces, ¿por qué debería ser un requisito legal un mayor control, por ejemplo, revisar la presión de los neumáticos al conducir? ¿No es eso simplemente otra restricción a nuestra libertad individual? No del todo, a menos que alguien piense que conducir con los neumáticos pinchados es un derecho fundamental y no un peligro en la carretera. Y la gente conduce con los neumáticos pinchados, o al menos con los neumáticos demasiado bajos.
¿Qué dicen los servicios de coches?
Un vistazo rápido a un buscador revela numerosas encuestas que demuestran repetidamente que los conductores no revisan regularmente la presión de los neumáticos de sus vehículos según lo recomendado. Por ejemplo, consulte la última encuesta de DEKRA. El ADAC también informa que los daños en los neumáticos de automóviles y camiones volvieron a encabezar la lista de daños en 2014. Es peligroso, incluso muy peligroso, para otros usuarios de la vía cuando los vehículos circulan con una presión incorrecta. Este debate sigue sin ser relevante. La presión correcta de los neumáticos debe medirse durante la conducción, utilizando sensores que muestran la presión y la temperatura de los neumáticos.
¿Es suficiente el ABS?
Comparar la velocidad de rotación de las ruedas, como la que ofrece el ABS, no es suficiente; de hecho, crea una falsa sensación de seguridad en los conductores. Revisar la presión de los neumáticos cada dos repostajes tampoco es suficiente. Lo importante es una advertencia fiable de los cambios de presión durante la conducción, y esto solo es posible si la presión y la temperatura de los neumáticos se miden directamente en el neumático mediante sensores. Solo con estas mediciones se puede advertir al conductor a tiempo, reaccionar y prevenir los daños más graves que siempre resultan de los reventones de neumáticos.
¿La presión de los neumáticos no es un asunto personal mío?
Esto no es un asunto privado, sino una cuestión de comportamiento responsable como usuario de la vía. ¿Quién quiere esperar ayuda al borde de la carretera, haga el tiempo que haga, después de pinchar una rueda? ¿O quién quiere hacer un viraje brusco para evitar un coche con una rueda pinchada que derrapa por toda la calzada, si es que eso es posible? En realidad, nadie.
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